En ciclos muy lejanos otros seres habían gobernado la Tierra. Habían vivido en grandes ciudades, y sus vestigios podían encontrarse aún -le habían dicho a Castro los inmortales de China- en unas piedras ciclópeas de algunas islas del Pacífico. Habían muerto muchísimo antes de la aparición del hombre, pero había artes que podrían revivirlos cuando los astros volvieran a ocupar su justa posición en los cielos de la eternidad
-H.P.Lovecraft, La Llamada de Cthulhu
Iniciando el año 2012, y con amenazas del fin del mundo, no hay tiempo que perder para explorar los secretos ocultos en Shadow of the Monolith. En este último Asylum Pack del ciclo Reliquias del Pasado, nuestra búsqueda de poderosos artefactos nos lleva al Pacífico Sur, donde en algún lugar bajo las olas se esconde la gran ciudad de R'lyeh... hasta el día en que las estrellas se alineen y los Primigenios sean liberados de su sueño.
Los exploradores europeos y la civilización occidental no han encontrado recursos útiles en esta parte del mundo, y la han dejado tranquila durante muchísimo tiempo. Únicamente a mediados del siglo XVIII el explorador británico Capitan James Cook realizó un esfuerzo para explorar esta zona. Aunque fue acuchillado hasta la muerte durante su tercera expedición, su cuerpo arrastrado fuera del barco, sus huesos limpiados y preservados, y de esta manera, el propio Capitán Cook se convirtió en una reliquia al final de un ritual Makahiki. Donde yace, ahora se ubica un monolito.
El señor de los lunáticos
Cualquiera que sea el secreto que yace en el obelisco que marca el lugar de la muerte de Cook, muchos son los que conspiran para mantenerlo oculto. Entre ellos se encuentran los agentes de Hastur. El culto al Rey de Amarillo ha ganado mucha influencia dentro de La Llamada de Cthulhu: El Juego de Cartas. Aunque depende de los sectarios como Artista del Espectáculo (Caja Básica, 87) y su efecto de sacrificio, sus lunáticos y el descenso a la locura es hoy en día suficiente para provocar o cancelar efectos
A medida que Aldebaran se traslada hacia su posición final, los Lunáticos de Hastur ganan más y más poder y flexibilidad en sus habilidades. En consecuencia, el Painter of Delusion(Shadow of the Monolith, 113) puede influenciar en la habilidad del Artista del Espectáculo no sólo volviéndose loco a si mismo, sino también forzando a otros lunáticos a volverse locos, haciendo de él un terrorífico señor de los lunáticos.
Un método para la locura
The Painter of Delusion muestra muchas opciones interesantes de como jugar una baraja de Hastur. No sólo puedes anular personajes con poderosos efectos con condiciones, como las Ratas de Cloaca Infectas (Secretos de Arkham, 44) y el The Large Man (El Mar de Arena, 27), sino que además lo puedes hacer a través de cualquier lunático. Esto significa que todos los lunáticos, como el Pirómano Enloquecido (Susurros en la oscuridad, 5) gana una habilidad adicional, que puede ser muy útil cuando no haya cartas de localización a quemar.
Con varios Lunáticos en juego, tendrás que tomar la decisión sobre que lunático volver loco con la habilidad del Pintor. Si vuelves loco a Painter of Delusion, no tendrás disponible su habilidad hasta que sea sanado, con lo que los otros lunáticos no podrán activar la nueva habilidad. Es un detalle sin importancia cuando preprares una baraja de lunáticos, pero a tener en cuenta. Con los suficientes lunáticos, y algunas copias del Manicomio de Arkham (Caja Básica, 146) serás capaz de anular estrategias basadas en las habilidades de personajes.
Ya veremos si aumentan además los lunáticos de otros facciones o neutrales.
