Bruno Katsner
Diletante prusiano
Después de esperar un rato junto al miembro del servicio, ve enfilar la luz de una linterna girando la esquina que da a la escalera. Felizmente aparecen los tres exploradores sanos y salvos, pero las miradas que lanzan de reojo a las escaleras del sótano delatan que ha sido una búsqueda tensa y peligrosa.
- Bienvenidos y bienhallados señores. - Les saludo, alegre de verlos de nuevo. - ¿Ha habido suerte por ahí abajo? -
* Por las expresiones de estupor y cansancio que traen mis compañeros no debe haber sido una fiesta lo de ahí abajo. Estos sótanos deben de ser un lugar muy poco agradable. *
- Por sus miradas creo que no, y además parece no ha sido una experiencia muy gratificante. Será mejor que volvamos a la recepción, expliquemos al director Wemhoff nuestra investigación y nos tranquilicemos tomando una copa. -
Dicho esto Bruno hace un ademán para volver al salón de la exposición.