Sectarios: Foro de la Llamada de Cthulhu

Heinrich Zweig
Arqueólogo y anticuario

El hombre restó importancia a aquello con un gesto.

- Me alegro de encontrarles. Creo que deberíamos reunirnos con el profesor Müller dentro para investigar qué es lo que ha ocurrido antes de que el tiempo borre las huellas. Comienzo a pensar en esto más como algo personal que como ajeno a nosotros conforme los extraños eventos nos van alcanzando. Todavía recuerdo la neblina amarilla de antes... -

Bruno Katsner
Diletante prusiano

Mientras descansa y se calma apoyado en la columna ve venir a su compañero Zweig, que parece buscarlo. Al detectarlo y verlo en semejante estado de excitación no puede disimular su cara de preocupación.

Dantrag escribió:- Me alegro de encontrarles. Creo que deberíamos reunirnos con el profesor Müller dentro para investigar qué es lo que ha ocurrido antes de que el tiempo borre las huellas. Comienzo a pensar en esto más como algo personal que como ajeno a nosotros conforme los extraños eventos nos van alcanzando. Todavía recuerdo la neblina amarilla de antes... -

En ese momento Bruno descubre con sorpresa que Diermissen se encuentra cerca suyo y susurra algo mientras lo mira.

* Por la pinta que tiene Adler parece que también ha sufrido algún tipo de "indisposición". *

Como puede se incorpora, se arregla un poco el traje para recuperar un poco de dignidad y atusándose el pelo dice:

- Sí....eh...sí, yo también puedo volver dentro. Uhm,...gracias querido Heinrich. Ehm, si es tan amable de guiarnos, de repente me siento un poco mareado...les sigo, les sigo. -

18 de abril de 1927, 21:57
Sala Egipcia del Neues Museum
Berlín, República de Weimar

Ayudados inicialmente por Heinrich, tanto Adler como Bruno Kastner se incorporan y vuelven al interior de museo. Pronto comprueban las caras de sorpresa del resto de visitantes, que no entienden porqué huyó la gente de la Sala Egipcia. Después de cruzar la sala comprueban como el Director Wemhoff se ha encargado, junto a dos trabajadores del museo, que nadie acceda a la estancia donde se hallaba el sarcófago.

Tras acceder al espacio, comprueban que el Profesor Kahlfuss y el Profesor Müller están estudiando los restos de cenizas de la víctima, que paradógicamente ya no son tales, sino que ahora son una extraña mancha en el suelo:

Una mancha de grosor prácticamente imperceptible, siendo sólo una forma poligonal dibujada en el suelo de un color absolutamente negro.

En la extraña y desconocida forma oscura que hay sobre el suelo no se marcan los contornos regulares de las baldosas del pavimento de mármol, no se reflejan los destellos de la luz ni se denota la sensación de que tenga profundidad o más dimensión que la del plano horizontal...

Adler Diermissen
Explorador y aventurero

- Disculpen mi... comportamiento. Sentí unas necesidad de salir que me es difícil de explicar. - Comienzo a excusarme al entrar en la sala. Menuda lacra para mi imagen la actuación que he dado.

Sin embargo la situación dista mucho de ser la que me esperaba.

- Señores... no comprendo. Donde está el cadáver del desafortunado. Y que es esa "mancha". - La última palabra es soltada con un tono diferente. Dejando claro que sólo es utilizada por no encontrar una forma de nombrar esa oscuridad.

Egmund Müller
Profesor de Historia

Müller mira aliviado a los recién llegados, pues no es lo mismo sentirse arropado por gente conocida en esos momentos que estar solo.

- Esto, querido Adler, es lo que ha quedado en el suelo al desaparecer los restos de ese pobre desdichado... Cómo de huesos y cenizas se ha producido este hueco de... oscuridad, es algo a lo que pienso nadie de esta sala tiene respuesta... -

Mientras habla, recuerda las linternas que todavía tiene en sus bolsillos y, haciendo uso de una de ellas, proyecta su luz a través del extraño orificio, aunque dudando obtener resultado alguno.

18 de abril de 1927, 21:58
Sala Egipcia del Neues Museum
Berlín, República de Weimar

Egmund Müller escribió:Mientras habla, recuerda las linternas que todavía tiene en sus bolsillos y, haciendo uso de una de ellas, proyecta su luz a través del extraño orificio, aunque dudando obtener resultado alguno.

El profesor de historia utiliza la linterna y el haz de luz que sale de esta cae sobre el agujero oscuro. Parece que sencillamente se proyecta sobre la extraña mancha, como si fuera una superficie opaca.

Egmund Müller
Profesor de Historia

- Interesante fenómeno... -Musita mientras su rostro palidece. - Aunque muy lejos de mi campo de conocimiento como para dar una explicación. -

* Como muchas de las cosas ocurridas aquí esta noche... *

- Señores, dadas las experiencias anteriores, la niebla amarilla y los rayos azules, dudo que esto signifique nada bueno... Propongo que tapemos esto con algo, quizás con el propio sarcófago, no lo sé, estoy totalmente perplejo y perdido. -

Burke Kahlfuss
Historiador revisionista


- ¿Interesante fenómeno? - Le inquiere a Müller el Profesor Kahlfuss. - ¡Ha sido increíble! Ustedes no lo han visto, ¡pero el agujero tiene profundidad! Su compañero ha metido su pipa dentro del agujero y la ha sacado, ¡es como si no hubiera pavimento! -

Todos los presentes miran sorprendidos a Egmund Müller, que asiente corroborando las explicaciones del historiador.

- Es como si las leyes de la física no funcionaran en esta inexplicable mancha. Siento mucho la muerte del caballero, ¡pero este fenómeno es fascinante! A lo largo de mi vida he escuchado cosas que me parecían improbables, ¡pero esto supera cualquier cábala que pudiera haber imaginado! -

Heinrich Zweig
Arqueólogo y anticuario

- Perdone que no me muestre tan entusiasmado. Como bien ha dicho, aquí había una persona viva antes y por algún extraño fenómeno se ha desintegrado hasta más allá que lo que cualquier degeneración producida por el paso del tiempo podría haber hecho, mucho menos a esta velocidad. Estoy de acuerdo con el profesor Müller en cubrir el lugar con el sarcófago o algún otro elemento lo suficientemente grande y pesado como para evitar que algo pueda caer por ahí. -

O que algo pudiera salir. Era capaz ya de esperar cualquier cosa visto lo visto.

Matthias Wemhoff
Director del Neues Museum


Tras las últimas palabras de Heinrich Zweig el Director Wemhoff parece recobrar los sentidos y sale de su ensimismamiento.

- Por favor, apoyaré cualquier medida que tomen, pero intenten no dañar ninguna pieza de la colección egipcia ni del museo... - Con estas palabras les indicaba que quizás no era muy favorable a mover el sarcófago. - Con su permiso me encargaré de que la gente vaya abandonado la exposición. En cinco minutos cerraré la sala al público. -

Y de inmediato Matthias Wemhoff se vuelve hacia la sala donde todavía hay muchos de los invitados a la inauguración de la exposición. Cabizbajo avanza hacia el personal de servicio y empieza a darles instrucciones.