Capítulo 6 - RELIQUIAS DE UN MUNDO OLVIDADO

[Dantrag]

Heinrich Zweig
Arqueólogo y anticuario

Heinrich observó aquella especie de conversación privada que el hombre mantenía consigo mismo. ¿Delirios de un loco o tal vez algo relevante?

- Así que usted es Kiefer, ¿podría decirme cuánto tiempo hace que trabaja en el museo, señor? - Preguntó amablemente buscando romper el hielo.

Aprovechó para aguzar el oído e intentar escuchar qué es lo que murmuraba aquel hombre tan extraño. A lo mejor sí era importante después de todo...

[sectario]

Adler Diermissen
Explorador y aventurero

- Así que usted es Kiefer, ¿podría decirme cuánto tiempo hace que trabaja en el museo, señor? - Preguntó al conserje.

Me mantengo algo alejado de Zweig. Dada la reciente información sobre la debilidad mental de Kiefer, es de especial interes no intimidarlo.

- Dejémosles algo de espacio a Kiefer y Zweig. - Digo en voz baja. Es posible que si el interlocutor es siempre el mismo, Kiefer se acabe encontrando más cómodo que si ha de ir respondiendo preguntas de diferentes personas.

[Riley]

18 de abril de 1927, 22:59
Sala de exposiciones del Neues Museum
Berlín, República de Weimar

Aprovechó para aguzar el oído e intentar escuchar qué es lo que murmuraba aquel hombre tan extraño. A lo mejor sí era importante después de todo...

El arqueólogo se aproximó sutilmente al peculiar y ligeramente desaliñado conserje y justo antes, y justo después de hacer su pregunta, pudo discernir [*] la rápida frase que murmuraba una y otra vez:

- La llamada es muy fuerte... -
Hace una breve pausa mientras no para de agitar ligeramente la cabeza adelante y atrás.


- La llamada es muy fuerte... -

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[*] Notas Guardián:

Tirada de Escuchar = 51 > 18 [ÉXITO] --- Heinrich Zweig

[Riley]

Kiefer Weissbrod
Conserje del Neues Museum

- Así que usted es Kiefer, ¿podría decirme cuánto tiempo hace que trabaja en el museo, señor? -

- Yo... yo... - El conserje parecía nervioso, si bien no parecía que fuera porqué estuvieran interrogándolo. Quizás la terrible experiencia lo había dejado anonadado, posiblemente más de lo que era normal en ese hombre de pocas luces. - Hace... hace más de veinte años... -

El conserje Weissbrod mueve a un lado y al otro su pie derecho, al mismo tiempo que se frota los dedos insistentemente una vez y otra. Su mirada se mantiene cabizbaja, observando como mueve su pie una y otra vez.

[Dantrag]

Heinrich Zweig
Arqueólogo y anticuario

El hombre frente a él le miró unos momentos. Aquella actitud era más propia del nerviosismo que de que tuviera algún tipo de tara mental. ¿Qué ocultaba realmente aquel tipo tan grotesco?

- En tal caso supongo que es un gran conocedor de este lugar, posiblemente más que cualquiera de nosotros. ¿De qué tipo de labores suele encargarse normalmente? -

Mejor ir poco a poco.

[manel8]

Egmund Müller
Profesor de Historia

El profesor Müller camina nerviosamente de un lado a otro de la sala mientras de vez en cuando echa una mirada hacia Heinrich y su contertulio, así como al resto de los presentes. Quería saber qué estaba pasando en el museo, aunque al mismo tiempo no podía a esperar a regresar a su casa y meterse en su mullida cama, donde intentaría olvidar para siempre lo que había vivido esta noche...

[Riley]

Kiefer Weissbrod
Conserje del Neues Museum

- En tal caso supongo que es un gran conocedor de este lugar, posiblemente más que cualquiera de nosotros. ¿De qué tipo de labores suele encargarse normalmente? -

- Si... si... conozco bien. Yo... yo... - además de nervioso Kiefer se mostraba dubitativo, y todo indicaba que le costaba asumir lo que le decían o incluso entenderlo - vigilo el museo... por las noches. Pa... pa... paseo por los pasadizos... -

El conserje continuaba frotándose los dedos de las manos sin parar.

[Dr Pajowsky]

Bruno Katsner
Diletante prusiano

* Parece una buena idea que Heinrich interrogue con calma al conserje, que no lo atosiguemos pues parece un individuo tímido y asustadizo. *

Para disimular y no entorpecer el trabajo de Zweig el diletante se aparta un poco, acercándose a Müller al que dirige las siguientes palabras en un tono calmado:

- ¿Qué tal se encuentra Herr Müller? Parece un poco nervioso, aunque quien no lo estaría con lo que hemos vivido esta noche. -

- Her Diermissen estará de acuerdo en que no se viven muchas veladas como esta, no creo que sea algo común ni en la vida de un aventurero como usted. -

Bruno con estas conversaciones intenta calmar los ánimos y a la vez disimular para que Kiefer se sienta cómodo y no se note interrogado.
De esta forma es más probable que Zweig obtenga la mayor cantidad de información del sospechoso conserje.

[Dantrag]

Heinrich Zweig
Arqueólogo y anticuario

- Lo dicho, un gran conocedor del museo. Creo que si yo intentara bajar a los sótanos solo acabaría irremediablemente perdido. Supongo que el Director le confiaría un puesto durante la exposición al igual que a todos los miembros del museo. ¿Qué fue lo que le encomendó exactamente? -

Mientras tanto le seguía observando con interés, atento a sus movimientos o a sus posibles murmullos. Lo que decía resultaba tan fascinante como aterrador.

[sectario]

Adler Diermissen
Explorador y aventurero

- Her Diermissen estará de acuerdo en que no se viven muchas veladas como esta, no creo que sea algo común ni en la vida de un aventurero como usted. -

Ante el comentario de Bruno no puedo hacer más que responder con una sonrisa cansada.

- No creo que nadie haya vivido una velada como la que estamos teniendo esta noche. Cada vez estoy más seguro que no somos más que títeres en un enfrentamientos de fuerzas que no puedo imaginarme. ¿Sabe que es lo que más me corroe por dentro? -

Dejo pasar unos segundos antes de continuar.

- En una cacería si fallas el disparo tu presa se puede echar sobre ti y matarte... una muerte dolorosa. Durante un expedición estás abierto a animales venenosos, enfermedades, inclemencias del tiempo... Pero al menos siempre uno mismo tiene capacidad de decisión. -

Continuo bajando la voz... no deseo molestar a Heinrich Zweig ni ser escuchado por Kiefer.

- Esta noche sin embargo me he sentido como creo que se siente una presa hostigada por un cazador. Sólo reaccionando a los sucesos. Ansío pero poder desvelar que sucede, poder vengar a Burke Kahlfuss... pero sobre todo ansío dejar de ser una presa. Poder actuar y anticiparme a los sucesos. -

Exhalo un suspiro.

- Quizás con lo que nos pueda decir Kiefer podamos hacer algo al respecto. -