Sectarios: Foro de la Llamada de Cthulhu

Adler Diermissen
Explorador y aventurero

Kurt Leber,Berlín Polizei escribió:

- Con su permiso herr... - y el propio Toefter es quien se lo susurra - ... Zweig, nosotros nos encargaremos de ello. Agradecemos sus inquietudes pero los civiles deben permanecer al margen. Ya he alertado al Director Wemhoff del grave error que ha supuesto no solicitar nuestra presencia ante el primer robo. ¿Saben donde se halla el colaborador? El conserje... -

Les pregunta a los investigadores mientras revisa la sala de exposiciones del Neues Museum con la vista que tras mirar al techo (con el lucernario roto) se posa en la mancha de sangre del suelo (donde hacía unos minutos se hallaba Kiefer suplicando).

- El conserje estaba... estaba ahí... - Respondo con voz cansada, y con un leve gesto del brazo. Como si levantarlo y dirigirlo a la mancha me pesase una tonelada. Por un momento pienso en continuar hablando, aportar un poco más de información sobre los últimos momentos de vida del conserje. Como ayudó a los monst... * no pienses en la palabra monstruo... asaltante. Fueron asaltantes. *, a los asaltantes, como les pidió que le llevarán con ellos. Pero no, es mejor no llamar la atención, no deseo ser sometido a un interrogatorio.

Bruno Katsner
Diletante prusiano

Adler Diermissen escribió:- El conserje estaba.... estaba ahí. - Respondo con voz cansada, y con un leve gesto del brazo[...]

- Herr Diermissen tiene razón, ahí es donde se encontraba el conserje. - Contesta Bruno para afianzar la declaración de su compañero y despejar dudas que pueda tener la policía. * Lo último que necesitamos es que nos sometan a un interrogatorio porque sospechen algo de nosotros. *

- Pero como puede ver ha desaparecido... lo único que le puedo decir es que no se dónde está, al salir de la habitación lo dejé ahí tirado en el suelo. -

Kurt Leber
Berlín Polizei


- ¿Qué lo dejó ahí tirado? -

En el rostro del agente Leber se dibuja una mueca de incredulidad.

- ¿El charco de sangre pertenece al conserje? No puede haber ido muy lejos tan herido... -

Y el policía mira con suspicacia a Bruno Katsner.

Egmund Müller
Profesor de Historia


- Errrr... Quizá deberían echar ustedes un vistazo en uno de los pasillos... Una de las ventanas que daban al río daba la impresión de haber sido forzada y puede que los asaltantes hayan intentado escapar por allí al escuchar su llegada. -

Comenta Müller al policía intentando desviar el repentino interés sobre Kastner.

Kurt Leber
Berlín Polizei


El agente de policía medita un instante tras el comentario de Heinrich Zweig. Al final asiente y parece decidirse por ir a explorar el museo.

- De acuerdo. No nos demoremos más. Usted Sr. Toepfer nos acompañará hacia la ventana que nos comentan que ha sido forzada. Sin lugar a dudas intentarán aprovechar esa salida. Dos de mis agentes se quedarán aquí y ustedes... -

Dice mirando a los cuatro investigadores.

- Ustedes han sido de gran ayuda, pero ahora deberían retirarse y volver a sus casas. Necesitamos trabajar sin interferencias . Durante los próximos días ya les llamaremos para prestar declaración. -

A continuación da instrucciones a dos de los policías que lo acompañan.

Adler Diermissen
Explorador y aventurero

Kurt Leber, Berlín Polizei escribió:
- Ustedes han sido de gran ayuda, pero ahora deberían retirarse y volver a sus casas. Necesitamos trabajar sin interferencias . Durante los próximos días ya les llamaremos para prestar declaración. -

* Retirarnos... irnos a casa. A nuestra casa... * Casi parece un sueño, algo tan simple.

Antes de salir, me dirijo a Matthias Wemhoff.

- Parece que por fin se ha acabado esta larga noche. Espero que pueda descansar. -

Y tras pensarlo unos instantes añado:

- Si necesita ayuda con algo especial no dude en avisarme. Puede decírselo también a Toepfer. - Espero que entienda a lo que me refiero por "Especial".

Después de la despedida me dirijo a la puerta. Al salir al exterior miro al cielo... la noche pocas veces me ha parecido tan oscura y fría. Quien sabe que cosas se esconden en la oscuridad. Espero en el exterior a que salgan el resto de mis compañeros. Me gustaría intercambiar direcciones. Una de las cosas que he aprendido esta noche, es que algunas cosas no se pueden hablar con cualquier persona. Quizás juntos podamos descubrir que hacía a esas dos reliquias tan especiales.

Matthias Wemhoff
Director del Neues Museum


- Lo tendré en cuenta.- Asiente herr Wemhoff a las palabras del investigador. - Todos ustedes han sido de gran ayuda; sin su presencia aquí esta noche quizás habrían habido más víctimas y posiblemente se habían perdido más piezas...-

Matthias Wemhoff toma aire antes de continuar hablando. Parece que intenta sacar fuerzas de flaqueza.

- Les estaré eternamente agradecidos.-

Luego mira al policía en jefe y añade:

- Discúlpeme agente Leber, pero yo me quedaré aquí custodiado con sus dos compañeros las piezas de la exposición...-

Heinrich Zweig
Arqueólogo y anticuario

El arqueólogo aceptó la gratitud del director, pero le resultó rara su petición. Cualquiera en su lugar desearía tomarse unos minutos, sobre todo después de lo que sus compañeros de fatiga le habían contado respecto al desaparecido ponente y lo ocurrido al conservador del museo.

- Herr Director, si no le importa me gustaría acompañarle. También me preocupa lo que ocurra con las piezas. -

Bruno Katsner
Diletante prusiano

Las palabras de la polícia fueron un gran alivio, sus infortunados comentarios no habían provocado más consecuencias que un pequeño mal trago.

* A casa, por fin podemos marcharnos a descansar a un lugar seguro. *

- Ehh...gracias Her Wemhoff, como bien ha apuntado Her Diermissen si necesita ayuda no dude en avisarme, ya conoce mis señas. Un placer conocerle...ejem...espero que todo vaya bien a partir de ahora. -

Después de despedirse del director Bruno se encamina al exterior a reunirse con Diermissen y respirar aliviado algo de aire fresco. De camino a la salida ver a su compañero Zweig que parece tener la intención de quedarse.

- Herr Zweig - le susurra - me reúno fuera con Diermissen, estaré un rato fuera esperándolo por si decide cambiar de idea. No se si será bueno permanecer más tiempo en este edificio que ahora se me antoja infernal. -

Dicho esto Bruno abandona con paso lo más firme posible que puede el Museo.