Sectarios: Foro de la Llamada de Cthulhu

Egmund Müller
Profesor de Historia

Müller termina con las formalidades con la policía. La temblorosa mano con la que firma la improvisada declaración no hace sino hacerle ser más consciente de por lo que ha pasado durante las últimas horas.

La llegada de los agentes le tranquilizó, pero al mismo tiempo, la bajada en el nivel de adrenalina provocó que le invadiese un profundo cansancio.

Casi murmurando se despide de los presentes, tras lo cual, con paso titubeante, se dirige hacia la salida, donde quiere despedirse de sus compañeros de aventuras. Y después, se marchará casa, donde se asegurará de cerrar puertas y ventanas. Espera no desarrollar una cierta paranoia a partir de ese momento, sabiendo lo que sabe ahora y lo que puede acechar en cualquier esquina. Necesita dormir y despejar su mente. No se le ocurre mejor ocasión para estrenar esa botella de brandy tan caro que le regalaron y que guardaba para un momento especial. Sí, seguro que después de tomarse una copa, o dos o tres, se sentirá mucho mejor y podrá descansar sin que le asalten pesadillas... o al menos eso espera...

Matthias Wemhoff
Director del Neues Museum

Heinrich Zweig escribió:- Herr Director, si no le importa me gustaría acompañarle. También me preocupa lo que ocurra con las piezas. -

- De acuerdo, pero no debe interferir en el trabajo de la policia. Ahora el asunto está en sus manos.-

Herr Wemhoff se despide de los otros investigadores de nuevo:

- La noche ha sido larga... Ojalá pudiera venir con ustedes... de nuevo, gracias por todo.-

18 de abril de 1927, 23:20
Exterior del Neues Museum
Berlín, República de Weimar


Mientras el Director Wemhoff se despide, el agente Leber y los otros dos policías y Toepfer cruzan el umbral de la puerta que conduce a las escaleras y al otro extremo del museo.

Los tres investigadores salen de la sala y descienden las escaleras del Neues Museum hasta salir a la calle. El aire fresco de la noche les llena los pulmones, sintiendo una sensación de liberación de toda la tensión que habían sufrido hasta el momento. Tras anotarse en sus agendas las direcciones de cada uno -para poder contactar en un futuro cercano- se marchan en dirección a sus casas.

Es muy tarde ya, y medianoche es más oscura de lo habitual, pero la noche en el museo ha sido muy ajetreada y todos se notan demasiado desvelados como para acogerse en un sueño reparador las próximas horas... Quizás el desvelar de medianoche es un mera anécdota después de todo lo ocurrido... Y quizás, y sólo quizás, será más agradable estar despierto que dormir y soñar con lo ocurrido...

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================= FIN DE LA CONCLUSIÓN =================

====================== EPÍLOGO =====================