I Liga nacional Arkham Horror

[sectario]

Por Cthulhu bendito...no me había dado cuenta

[sectario]

Este domingo conseguimos quedar para plantar cara a un nuevo reto/escenario. En esta ocasión fue La leyenda del escarabeo. No se porqué acabemos jugando primero el escenario cuarto y luego el tercero...

La partida empezó perfecta. Eramos dos intrepidos investigadores, y en el primer turno la científica quedó rezagada en una localización mientras la diletante veía sus huesos en la carcel. Un turno en blanco. Mientras los portales comenzaban a ir apareciendo por Arkham. No tardó en aparecer el primer rumor, que provocaba que los aliados fueran desapareciendo. Por fortuna y después de varios turnos conseguimos superar el rumor... aunque la mitad de los aliados ya habían desaparecido de Arkham. El Quinto escarabeo de Amenthop fue especialmente útil. Facilitando evitar monstruos poderosos que guardaban algunos portales, entre los que se destacaba un Retoño Oscuro. Sí, el primer monstruo que apareció ya era de borde amarillo. Cuando teníamos 4 portales sellados, se cometió un gran error. Alguien dijo "parece que la partida está bien encaminada". La siguiente carta de Mitos fue un rumor, obligaba a sacrificar un aliado o el nivel de perdición iría aumentado. Por desgracía el único investigador con rumor acababa de ir a Otros Mundos, y varios monstruos estaban acumulandose en las calles necesarias para ir al lugar del sacrificio. La siguiente carta de mitos no abría portal, sino que colocaba dos fichas de perdición (más otra del rumor)... y en el siguiente turno volvió a abrirse un nuevo portal. No se como lo hicimos pero en 3 turnos pusimos 4/6 contadores de perdición .

Moraleja... nunca digas "parece que la partida está bien encaminada" mientras estás jugando un Arkham HOrror.

Por desgracia la científica iba armada con un látigo, y la diletante con una escopeta. Sin armas mágicas, sin hechizos de combate, y con un trofeo de monstruo por cabeza nos pusimos en fila india para ser devorados de uno en uno.

Después de 4 escenarios... nuestra puntuación es de 2 victorias vs 2 derrotas.

[Eban]

Sexto escenario: Adiós Mr. Whateley
Equipo: Inferno -1 (5 miembros)

Como siempre la partida empezó poniéndose muy dificil. De entrada dos de los cinco jugadores pasarian problemas para conseguir pistas. Uno porque no podía tener más de cuatro y otro porque no podía recoger pistas del tablero. Y a eso se añade un xenofobo, un manco con -1 pelea y un cageca con -1 a voluntad.

En el primer turno se abre un portal en dunwich que absorve a Jacqueline Fine pero Harvey Walters muy caballeroso se lanza tras ella para ayudarla. Mientras tanto rita young ponía la directa para volver a arkham ya que se había dejado una tarea por hacer, y mark harrigan nos demostraba porque él era un ejercito de un solo hombre.
Las cosas se complicaron con varios portales abriendose consecutivamente y harvey que gracias a un par de tomos había conseguido las lupas necesarias para cerrar el portal veia que se complicaba todo al no poder cerrar el portal turno tras turno.

Finalmente las cosas empezaron a funcionar, se limpio el tablero de monstruos y se cerraron varios portales aunque solo se pudo sellar uno de ellos. Pero de esta forma el peligro de que yog-sothoth alcanzará arkham. Ya con más calma el grupo pudo armarse, encontrar aliados dispuestos a colaborar en la dura misión de acabar con el peligro y de paso acumular pistas para seguir sellando portales.
El camino no fue fácil y hubo varios momentos en los que temimos por nuestras vidas pero jacqueline fine resulto útil para despachar un par de rumores peligrosos y cuando leo anderson pudo volver a arkham tras pasarse SEIS TURNOS en los otros mundos cerro su portal pese a estar maldito, aunque le costo un par de turnos.
Con esto la partida estaba encaminada y jacqueline fine junto al profesor armitage volvieron a la granja whateley dispuestos a descubrir que estaba pasando allí. Pero ya no era necesario pues harvey walters encontro un valioso tomo que le proporcionaba una pista por turno a costa de una tirada de saber. Con ese conocimiento pudo cerrar otro portal y asegurar la victoria.

Solo en la parte final cuando mark harrigan fallo dos o tres intentos de sellar el último portal vimos peligrar la situación pero tuvimos suerte de que Yog-sothoth no encontrará el camino a arkham en esos últimos turnos cuando ya estaba a punto de conseguirlo. Finalmente se cerraron los portales y se tuvo que volver a su plano de existencia con el rabo entre las piernas mientras los investigadores se retiraban a la pensión de ma para tomar un refrigerio.

[sectario]

pudo volver a arkham tras pasarse SEIS TURNOS en los otros mundos cerro su portal pese a estar maldito, aunque le costo un par de turnos.

je je... el jugador estaría pensando en cortarse las venas .

[lucifugo]

Eban escribió: pudo volver a arkham tras pasarse SEIS TURNOS en los otros mundos cerro su portal pese a estar maldito, aunque le costo un par de turnos.


je je... el jugador estaría pensando en cortarse las venas .

¿posiblemente era el día de la marmota?

por cierto... qué gran idea para un rumor o entorno... pensaré en ella...

[lucifugo]

Cuando teníamos 4 portales sellados, se cometió un gran error. Alguien dijo "parece que la partida está bien encaminada".

jejeje... a nosotros también nos ha pasado eso en un par de ocasiones. aún así, es divertido que a alguien se le escape esa frase (o algo parecido) y luego todos nos lancemos miradas alarmantes...

un saludo

[sectario]

Ya tenemos el septimo escenario (ya quedan menos)
"Tras la terrible lucha en Sentinel Hill, una horrible tormenta helada, poco común en Abril, se desató sobre Arkham, y sin apenas poder descansar, encontraron a Gilman en el suelo de la buhardilla mucho antes de que amaneciera, pues el terrible grito se había escuchado por toda la casa. Estaba vivo, con los ojos abiertos y fijos, pero parecía medio inconsciente. Tenía en el cuello las señales dejadas por unas manos asesinas, y algo le había mordido en el tobillo. Tenía la ropa muy arrugada y su estado era deplorable. Pensó atemorizado, rehusando imaginar la respuesta, qué nueva fórmula había adoptado el sonambulismo que lo afectaba.

Estaba medio aturdido por una señal que decía haber recibido en respuesta a sus estudios y se resistió a recibir ayuda frenéticamente cuando se oyó el chillido de una rata que llegaba desde el otro lado de la pared inclinada.

Una vez acomodado Gilman en la cama, enviaron a buscar al Dr. Malkowski, un médico de la vecindad de probada discreción. Le puso éste dos inyecciones hipodérmicas que le relajaron y le sumieron en un sueño reparador. El enfermo recobró el conocimiento varias veces durante el día y narró algunos pasajes de sus pesadillas más recientes. Fue un proceso muy penoso, y desde el principio se puso de manifiesto un hecho desconcertante: Gilman no deseaba hablar de sus pesadillas. Anteriormente siempre había confiado en sus allegados, pero ahora era como si tratara de ocultar algo. No fue sino tras la insistencia de todos que empezó, a regañadientes y pareciendo omitir detalles, a contar lo sucedido.

Pese a todas las advertencias y consejos bien intencionados no había podido evitar caer en la tentación de leer El rey de amarillo, el grimorio maldito por excelencia. Quizás no tan famoso como el infame Necronomicón pero no por ello menos inquietante. Aunque ya han pasado muchas décadas desde que salió de imprenta y a estas alturas del siglo XX nada debería sorprenderlo, lo cierto es que aún conserva esa capacidad de sugestión que escandalizó a las mentes bienpensantes de fines del XIX e hizo que fuese recibido con una denuncia universal, tanto por parte del púlpito como de la prensa. Sin embargo, tal denuncia no hizo sino extender su fama entre los círculos intelectuales y literarios de la época. Dicen que el autor se disparó un tiro después de dar a luz semejante monstruosidad, pero Gilman cree que todavía vive, que las balas nada pueden contra un demonio de esa especie.

- Es un libro de grandes verdades - dijo -. Verdades que enloquecen a los hombres y arruinan sus vidas. No me importa que el libro sea, como dicen, la misma esencia suprema del arte. Es un crimen haberlo escrito y por mi parte jamás volveré a abrir sus páginas.

Cuando se le preguntó el motivo de esa lectura no supo bien que responder, farfulló acerca de un panfleto anunciando una obra que era fundamental visitar, la obra de teatro de ese libro maldito, y que no tuvo otro remedio que tratar de conocer. Estuvo toda la noche leyendo y apenas había descansado desde su regreso de Dunwich. Ahora parecía enloquecido y ansioso por acudir a ver la obra de teatro que en breve se estrenaría.

El doctor le prohibió terminantemente que saliera de su habitación hasta pasados al menos unos días para restablecerse del gran desgaste físico y psicológico sufrido estas semanas, más aún con la ventisca que soplaba fuera. Gilman finalmente se rindió y prometió acatar la orden… pero quién bien lo conoce pudo vislumbrar un atisbo de mentira en su mirada."





Un escenario basado en El Rey Amarillo, en el que los investigadores con poca Cordura máxima lo van a pasar bastante mal

[Eban]

Este sábado lo vamos a jugar, que hemos pillado la liga esta con ganas
Y va a ser la primera vez que juguemos con el rey amarillo.

[sectario]

Y va a ser la primera vez que juguemos con el rey amarillo.

Pues me temo que ya tienes la excusa para jugar la segunda vez con El Rey Amarillo

Los tres ejércitos del Rey Introducción al octavo escenario de la liga de Arkham Horror en Edge Entertainment

Durante su forzada convalecencia Gilman, no se sabe cómo, compró una entrada para la obra El Rey de Amarillo. Gilman cree que es en esa obra donde va a encontrar mayor cantidad de información sobre el enigmático libro. Parece ser una obra de teatro, un drama en dos actos.

- Lo leí y lo releí, y lloré y reí y temblé presa de un horror que aún me asalta a veces- comenta Gilman-. Esto es lo que me perturba, porque no puedo olvidarme de Carcosa, donde negras estrellas cuelgan de los cielos, donde las sombras de los pensamientos de los hombres se alargan en la tarde, cuando los soles gemelos se hunden en el Lago de Hali, y mi mente llevará para siempre el recuerdo de la Máscara Pálida.

Pero lo más interesante es lo que averiguó sobre las circunstancias de su publicación. El gobierno francés suspendió la primera representación de la obra en París, lo cuál generó aún más expectación en Londres, y sucesivamente en otras capitales europeas. La noticia se difundió por todo el mundo como una enfermedad contagiosa, prohibida aquí, anulada allá, denunciada por la prensa y el púlpito, censurada incluso por los más avanzados entre los críticos teatrales. No violaba ninguna ley, ningún principio definido, pero cualquiera podía sentir que la naturaleza humana era incapaz de soportar el veneno que destilaba esta, según Gilman, hermosa, estupenda creación, terrible en su simplicidad, irresistible en su verdad. ¿Acaso ya la había visto?

El rostro de Gilman era un espejo a la locura, su extraña lucidez enmascaraba el horror que parecía estar a punto de desatarse.

Avanzaba la tarde, y como hacía calor, Gilman decidió salir a dar un paseo. Su vacía mirada no acompañaba en absoluto su forzada sonrisa. Antes de alejarse de la casa, un hombre de rostro desagradable se puso a caminar a la par de Gilman. ¿Quién era esa nueva compañía? ¿Qué deseaba de ese pobre diablo?

Era bien entrada la noche y Gilman no había regresado. La ciudad estaba realmente agitada; sirenas de la policía pugnaban por vencer en volumen a lo que parecía ser el sonido de una turba enloquecida. ¡Ya había suficiente! Si Gilman era incapaz de cuidar de si mismo no quedaba más remedio que atraparlo y llevarlo a algún sitio seguro.

Las calles parecían haber sufrido el asedio constante de un ejército de lunáticos, los destrozos habían cambiado la apariencia de todo lo conocido dándole un aspecto de diente carcomido por las caries. Las paredes de ciertos edificios tenían pintadas vandálicas de lo que parecía un símbolo extraño de color amarillo…



Escenario 8: Los tres ejércitos del Rey

"Rompen las olas neblinosas a lo largo de la costa. Los soles gemelos se hunden tras el lago. Se prolongan las sombras en Carcosa. Extraña es la noche en que surgen estrellas negras, y extrañas lunas giran por los cielos. Pero más extraña todavía es la Perdida Carcosa. Los cantos que cantarán las Híades donde flamean los andrajos del Rey deben morir en la Penumbrosa Carcosa. Canto de mi alma, se me ha muerto la voz, muere sin ser cantada, como las lágrimas no derramadas, se secan y mueren en la Perdida Carcosa."

¡Arkham está bajo asedio! ¡Sobrevive a este Escenario 8 de la primera Liga de Arkham Horror de Edge Entertainment!



Y el aliado Walter Gilmann

[Eban]

Estamos bastante verdes con la expansión del rey amarillo pero logramos solventar el anterior escenario aunque sin hacer muchos puntos. Este a priori no lo veo excesivamente complicado una vez que alguien se haya cebado para enfrentarse a las turbas porque creo que tienen fortaleza cuatro.