Deriva

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Detalle
Título: Deriva
Título original: Deriva
Autor: Beatriz T. Sánchez
Fecha creación:
Fecha publicación 2016
Primera publicación Adoradores de Cthulhu
Colaboradores: No

Tabla de contenidos

Primer párrafo

Anders Thorwaldsen, a pesar de su experiencia, se hallaba por completo desorientado, aplastado por la soledad sólida y un horizonte reducido a la unión de dos láminas azules, líquida y móvil la inferior, el océano, más clara y etérea la superior, el cielo. Se mantenía inmerso en una extraña calma chicha que le desasosegaba hasta la médula.


Resumen (contiene spoilers)

Anders Thorwalsen se despierta en un bote. Ha recibido un golpe en la cabeza. Estaba en el Seagull, bergantín, cuando se adentró en una tormenta. Cuando empezaron a arriar las velas eran las 3 de la tarde ahora está anocheciendo. puede hacer horas desde que está inconsciente.

Recuerda la historia del viejo Frank, un compañero. Este le contó que las sirenas eran un mito, pero que había lago parecido y peor en el mar. Seres medio peces medio humanos que adoraban a algo que duerme en una ciudad hundida, Cthulhu.

Esa noche comienza a observar algo en el mar, notar golpes en la parte inferior del bote. Intenta defenderse con su cuchillo, pero es apresado por manos frías y blandas manos, que le recuerden a un pez muerto. Tras ser levantado por varias manos, Anders en echado al mar. Donde los hijos de Dagón, adoradores de Cthulhu, le sonríen con sus dientes carnívoros.

Inspiración

Detalles

Conexiones con otros relatos de Lovecraft

Personajes principales

Fragmentos

El viejo le explicó que las sirenas eran un mito pero que había algo parecido en el mar, pero a peor. En otro navío, Hans había trabado amistad con un marinero, un tipo que decía ser de un pequeño puebo de pescadores en la costa de Massachussets. ¿Cómo le había llamado? Anders no era capaz de precisarlo... ¿Innsmouth, tal vez?. El caso es que fue quien le habló de la existencia de unos seres marinos, medio peces, medio anfibios, pero de traza, tamaño e inteligencia humanas... eran la progenie de una pareja de enorme tamaño, adema´s inmortal, pues a día de hoy todavía descansan , abotargados, rodeados de sus numerosos hijos en una sima abisal, ajenos a cualquier desgaste de su esencia, viendo pasar los siglos, los milenios... el Padre Dagón y la Madre Hidra.

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