Mordiggian
De Wiki Cthulhu juego de Rol
PERFIL El Rastro de Cthulhu | |
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Umbral de Golpe: | |
Modificador de Alerta | |
Modificador de Sigilo: | |
Arma | Modificador |
Protección: | |
Perdida Estabilidad: | |
Salud: |
Tabla de contenidos |
Descripción
- Mordiggian, el Dios de los Muertos aparece como una enorme vermiforme masa de muerte, tinieblas y corrupción. Sus ídolos parecen cuerpos putrefactos sin extremidades y sin ojos. Su forma exacta cambia como una fotografía sacada a intervalos de carne pudriéndose, y es difícil determinar porque, entre otras cosas, el Primigenio absorbe todo el calor y la luz de una habitación.
- Mordiggian es el Padre de los Gules, y es adorado por los más ancianos y poderosos de esa raza, así como por los necromantes que trafican con ellos. Se han cavado túneles de Gul desde lugares terrenales de enterramiento hasta la ciudad prisión de Mordiggian, Zu-Bha-Sair en las Tierras del Sueño.
- Mordiggian es la deidad funeraria del futuro continente de Zothique y es adorado en los templo zigurat de Zul-Bha-Sair por sacerdotes con púrpuras togas funerarias y plateadas máscaras de calavera.
- Mordiggian concede a sus aodradores más devotos la inmortalidad como Gules, pero le ofenden los intentos de resucitar a los muertos que son de su legítima propiedad.
- Mordiggian es la mayor de las Semilla informes de Tsathoggua.
- Mordiggian , el Gran Gul toma la forma de un sabueso alado similar a una esfinge, de apariencia odiosa y lasciva. Es el espantoso símbolo del alma de la secta devoradora de cadáveres de la inaccesible Leng, en Asia central. Quienes ofenden a la secta o a sus inmortales sacerdotes no muertos son cazados por su forma astral.
- Mordiggian es en lo que todos los demás Primigenios y otros dioses se transformarán al final de su vida consciente. Los consumirá e incorporará a todos, y entonces devorará el cadáver del mundo,
Enlace Externo
Relatos
- El idolo oscuro (Clark Ashton Smith)
En las ciudades de Yoros y en Zul-Bha-Sair, la morada de la deidad vampírica Mordiggian, se hablaba de sus hazañas en bajos susurros
Dentro del ataúd había un amuleto de curioso y exótico diseño, que aparentemente había estado suspendido del cuello del yacente. Era una figura, extra¬ñamente formal, de un sabueso agazapado y alado, o la de una esfinge de rostro semicanino, y estaba exquisitamente trabajada en un estilo oriental y antiguo, en una pieza de jade verde. La expresión de ese rostro resultaba sumamente repulsiva, trasluciendo a un tiempo muerte, bestialidad y malevolencia