Hotel Gilman House

De Wiki Cthulhu juego de Rol

Lugar
Nombre: Hotel Gilman House
Situación: Innsmouth
Tipo: Edificio-Hoteñ
Pronunciación: -

Historia

Es el único hotel que continúa abierto en Innsmouth, un edificio de cinco plantas que data de la década de 1830. Este hotel, regio en sus días, fue construido por Jebediah Gilman, que invirtió en él los últimos fondos del comercio marítimo obtenidos por la familia, cuya fortuna había menguado tras una serie de naufragios. El hotel fue un intento por cambiar la suerte del viejo clan. Tras un período de prosperidad, la clientela se redujo al hundirse la economía de Innsmouth durante la segunda mitad del s. XIX. Aunque continúa abierto, ha estado desocupado la mayor parte de lo que va de siglo. Una tirada exitosa de Idea sevirá para advertir que el edificio carece de salidas de incendios, una clara violación de las leyes estatales de seguridad.

Joe Sargent pasa dos veces al día a llevarse y entregar el correo y los periódicos de Arkham y Newburyport. El recepcionista que atiende de día es un humano normal, de 62 años, llamado George Habbit. Es fiel a los híbridos, en especial al dueño del hotel, un tal F. Murray Gilman, de 45 años. Habbit suele alojar a los huéspedes en las plantas superiores, aislándolos y dificultando su posible huida. Es muy reservado y no responderá a preguntas acerca de Innsmouth. No hay botones, y los huéspedes tendrán que subir las maletas a sus habitaciones.

El recepcionista nocturno es el malhumorado Charles Gilman, el hijo de 26 años del dueño. Resulta evidente que es un híbrido. Charles también aloja a los huéspedes en las plantas superiores, lejos de cualquier salida fácil. Si hay una propina en perspectiva. Charles ayudará a los huéspedes con su equipaje. Una habitación cuesta 2$ por noche, y no se sirve comida. Las habitaciones son sencillas y están polvorientas. En muchas de ellas sólo hay una ventana, una cama individual, una bombilla al descubierto y un armario estropeado. Por lo general, las habitaciones en las que se aloje a los investigadores no tendrán cerrojos en las puertas (aunque sí habrá marcas de haberlos tenido). La mayoría de las habitaciones están comunicadas con las de los lados, de nuevo sin los cerrojos que resultarían apropiados. No hay baños individuales en las habitaciones, sino que cada planta dispone de unas instalaciones compartidas situadas al final del pasillo. Estos baños están equipados con antiguas tazas de mármol y bañeras de estaño, y están decorados con un mohoso artesonado.

El Gilman House suele ser el último lugar que los demasiado fisgones llegan a ver. Una vez alojados aquí, los híbridos los matan o bien los secuestran para sacrificarlos a los Profundos o al Shoggoth. Huir desde las plantas superiores es casi imposible. Al noroeste y al suroeste hay edificios de ladrillo con tejados inclinados que quedan a ras del Hotel Gilman House. Desde una ventana alta, alguien que quisiera escapar podría utilizar una cuerda o algo similar para alcanzar esos tejados. Un fallo en una tirada probablemente resultaría en una caída hasta el patio de piedra que hay abajo, aplicándose el daño normal. Una vez alcanzado el tejado de uno de los edificios vecinos se puede llegar a la calle pasando a través de alguna claraboya rota, y bajando por tramos de escalones polvorientos.

Relatos

hay un hotel en Innsmouth; se llama Gilman House, pero me parece que no es gran cosa. Yo le aconsejaría que no se quedara [...] Hubo un inspector de Hacienda que paró en el Gilman hará unos dos años, y sacó de allí un sinfín de impresiones desagradables. Parece que tienen una multitud de gentes extrañas en ese hotel, porque el buen hombre no paró de oír en las otras habitaciones unas voces que le producían escalofríos. Decía que hablaban en un idioma extranjero, pero lo peor era una voz extraña que hablaba de cuando en cuando. [...] Sobre la puerta, un letrero medio borrado proclamaba que aquello era Gilman House [...] regresé en seguida a la fría habitación del Gilman. Al entrar cogí el periódico de la tarde y una revista llena de cagadas de mosca que había en un estante desvencijado, junto al pupitre del conserje.

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