Basil Elton

De Wiki Cthulhu juego de Rol

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Descripción

Narrador del relato La nave blanca. Es guardián de un faro North Point (trabajo que le viene de familia, tanto su padre como abuelo habían guardado el mismo faro), cercano a Kingsport. Durante varias noches observa una extraña Nave blanca, que aparecía sólo en las noches de luna llena. Aunque era extraño, bogaba siempre tranquila de forma independiente al estado de la mar. En la borda de este barco, un hombre barbudo solía hacer señas para que embarcara. Finalmente Basil Elton decide aceptar, y embarca.

Inicia un viaje, cruzando tierras extrañas como Zar o Xura. En sucesivas noches continua realizando viajes en la misma nave. Es un uno de estos viajes en los que oye nombrar a Cathuria "es el hogar de los dioses y la tierra de desconocidas ciudades de oro". Elton convence al capitán para visitar la mítica ciudad de Cathuria, a pesar de que el capitán lo desaprueba. Finalmente cuando la nave se dirige a Cathuria cae por las cataratas del fin del mundo. A la noche siguiente Basil Elton encuentra que el faro se ha apagado y un barco ha naufragado. Entre los restos del naufragio encuentra un mastil de una blancura más pura que la espuma de las olas o la nieve de las montañas.

Desde entonces Elton dejó de ver la Nave blanca por las noches.

En "La búsqueda en sueños de la ignota Kadath", Randolph Carter -preso en uno de los galeones negros que navegan en el puerto de Dylath-Leen- mientras navega por el mar del sur, recuerda haber oído sobre este mar a un "soñador de la tierra - un farero de la antigua Kingsport"


Su nieto Nathaniel Elton repetirá su búsqueda, aunque con un final completamente diferente.

Armas

Hechizos

Más información

El Basil Elton aparece en el juego de cartas La llamada de Cthulhu CCG / LCG dentro del Asylum Pack Sueños de Kingsport, identificado como F13

Relatos

Soy Basil Elton, guardián de la luz de North Point, tal como lo fueron mi padre y mi abuelo antes que yo [...] Del sur era de donde solía arribar la nave blanca cuando la luna lucía llena y alta en los cielos [...] Una noche columbré sobre cubierta a un hombre barbudo y togado, y parecía llamarme con señas a embarcar hacia incitantes costas desconocidas [...] Al alba descendí de la torre y busqué los restos del naufragio entre las rocas, pero tan sólo hallé esto: un extraño pájaro color azul cielo, y un mástil hecho añicos, de una blancura mayor que la de la espuma de las olas o la nieve de las montañas.

Frente a él vio pasar tierras gloriosas y ciudades que un compañero de ensueños terrestres -torrero de faro de un antiguo puerto- le había descrito a menudo tiempo atrás;


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